

Discos duros externos o portátiles.
¿Qué es mejor 2.5 o 3.5 pulgadas?
Discos duros externos
Para definir un disco duro externo podemos decir que es un sistema de almacenamiento de datos que se conecta al dispositivo principal (ordenador de sobremesa, portátil, tablet, etc) para guardar información que no se va a requerir de forma constante.


Características de los discos duros externos:
1.- Tamaño y alimentación externa
Los discos duros externos pueden ser de 2,5 o de 3,5 pulgadas de tamaño. Esto es importante porque los primeros reciben la alimentación eléctrica directamente del dispositivo (ordenador, tablet, etc) al que estén conectados, mientras que los de 3,5 necesitan conectarse a una fuente de alimentación adicional.
Algunos discos duros externos de 2,5 pulgadas pueden requerir un cable en Y de forma que se conectan al ordenador mediante dos cables USB para recibir la alimentación necesaria para funcionar.
1.- Capacidad
La capacidad de almacenamiento de los discos duros externos actuales puede alcanzar varios Terabytes de memoria. Lo ideal es que determines tus necesidades de uso para acertar con la capacidad que requieres. Los discos de estado sólido, al tener un coste por gigabyte de almacenamiento mayor, habitualmente presentan menores capacidades, mientras que los discos duros magnéticos pueden ofrecer por el mismo precio mucha más memoria. Las principales marcas de discos duros son Western Digital, Seagate y Toshiba. En general, los dispositivos de Western Digital se caracterizan por su robustez y velocidad, mientras que Seagate fabrica discos duros muy fiables y Toshiba ofrece diseños más minimalistas y compactos.
Fix & recovery computers.
*Información obtenida de Kingston.com y Xataka.com
2.- Interfaz y conexión
Los discos duros externos suelen conectarse a los dispositivos mediante conexión USB o SATA externa (eSATA). Lo más frecuente es que dispongan de conectividad por USB ya que es el estándar más frecuentemente aceptado por la mayoría de ordenadores, tabletas y móviles actuales.
Algunos discos externos también incorporan conexión Wifi para guardar y enviar los datos de forma inalámbrica. Las velocidades de trasferencia no son tan elevadas, pero en cambio se gana mucho en comodidad.
La conexión USB 2.0 presenta una velocidad máxima de transferencia de datos de 60 MB/segundo.
La conexión USB 3.0 proporciona velocidades de transferencia de 300 MB/segundo por lo que permite aprovechar al máximo la velocidad de la mayoría de discos duros magnéticos, cuya velocidad de escritura y lectura de datos oscila entre los 80 MB y 150 MB por segundo. Para sacar todo el provecho a una conexión USB 3.0 debería usarse un disco de estado sólido, la velocidad del cual puede superar los 500 MB/s.
La conexión eSATA ofrece velocidades de transferencia de hasta 300 MB/segundo y recibe la alimentación directamente del propio cable. eSATA está considerado como una interfaz de uso profesional en comparación con USB. eSATA presenta la ventaja de que está diseñado para funcionar con discos duros principalmente, como ordenadores avanzados de diseño gráfico.